lunes, 25 de noviembre de 2013

OBJETIVOS

Los objetivos de este blog, el cual forma parte de una practica escolar de la materia de NTIC de la Universidad de Sonora, son los siguientes:


Conceptos y factores determinantes de la localización
Estrategias de localización
Localización internacional
http://eco.mdp.edu.ar/cendocu/repositorio/00912.pdf
Selección de un emplazamiento 



LOCALIZACION INTERNACIONAL
Como ya se ha señalado, debido a la globalización de los mercados, las decisiones de localización se han vuelto paulatinamente más complejas. La actual globalización conlleva, en ocasiones, una desintegración de los procesos productivos, en la que productos y servicios fabricados en el extranjero se combinan con los fabricantes en los países de origen. De esta forma muchas empresas tienen que plantearse la decisión de localización considerando, en principio, cualquier punto de del planeta. Es decir, si bien hasta hace unos años estas decisiones se circunscribían al ámbito geográfico de un país concreto, aquel donde la empresa había estado operando tradicional mente. En la actualidad el ámbito geográfico de la decisión es internacional. En este sentido, los últimos treinta años han sido testigos de la expansión de un mercado mundial para casi todas las empresas importantes, ocupando la localización un papel central de este proceso.
Aunque las tendencias que afectan a la ubicación de la producción empujan a empresas hacia la fabricación mundialmente dispersa, sus efectos no se sentirán por igual en todos los sectores. Así las industrias más jóvenes tenderán a adoptar unas redes de fabricación más centralizadas, debido al mayor ritmo de cambio de la tecnología de los productos y procesos y a la naturaleza de la demanda del producto. Otras, independientemente de su mayor o menor madurez, han optado por fórmulas alternativas, como la subcontratación o, incluso, la reducción del número de plantas. Un tercer grupo de empresas, sin embargo, posee redes de fabricación totalmente dispersas.
Las investigaciones de Klassen y  Whybark relevo que la barrera más importante para la eficiencia en las operaciones manufactureras a escala mundial es que muchas empresas no adoptan una visión global de sus oportunidades de mercado y sus competidores. Los mercados mundiales imponen nuevas normas de tiempo y calidad. Además, deben poseer un conocimiento adecuado de sus competidores globales, lo cual requiere más capacidad de evaluación que cuando dichos competidores solo son nacionales.

Objetivos de la localización internacional
Los objetivos que una empresa puede perseguir cuando decide fabricar en un país diferente al de origen son múltiples. Algunos objetivos, tales como la reducción de costos de la mano de obra y del capital o el ahorro de impuestos, son tangibles y fáciles de medir; otros, como el aprendizaje de los centros de investigación extranjeros o atraer talento global, son intangibles y difíciles de medir. El modo como le empresa trata los objetivos intangibles dice mucho acerca del papel de la función de productos en la estrategia competitiva. Si el papel es insignificante se potencian los objetivos tangibles y si es clave adquieren mayor relevancia los objetivos intangibles. No obstante, cabría señalar los objetivos que en las últimas décadas están teniendo un paso fundamental a la hora de plantearse nuevas localizaciones: a) introducirse en un nuevo mercado y/o seguir a los clientes, b) obtener unos costes de aprovisionamiento y/o de producción menores, fundamentalmente, gracias a los menores salarios del país destino.
Con relación a la primera razón, la evolución hacia un comercio mundial basado en tres bloques regionales del país, Norteamérica, Europa y Asia. Crea incentivos para que las empresas sigan estrategias que les permitan una presencia manufacturera en cada región de demanda importante y comercio no restringido. Cada uno de estos bloques comerciales está caracterizado por unos movimientos internos relativamente libres de mercancía y medios de producción, normas comunes y políticas macroeconómicas coordinadas. Las empresas que utilicen estrategias basadas en la exportación se enfrentaras con obstáculos administrativos adicionales y barreras reguladoras potencialmente perjudiciales. Por ellos, resulta positivo para una empresa de ámbito mundial contar con al menos una instalación productiva en cada región de demanda significativa, y no solo por las restricciones arancelarias y no arancelarias, sino para estar cerca de los mercados de los principales clientes.
Gran número de empresas comprendieron pronto que los mercados no iban a limitarse exclusivamente a los nacionales, sino que las nuevas tendencias de mercado hacia la internacionalización de las empresas y, más tarde, la globalización, hacían necesario abrir sus puertas hacia el exterior.
Asimismo, en el marco de la subcontratación avanzada o comakership, las  estrechas relaciones que los proveedores deben mantener con sus clientes obliga a aquellos a localizarse cerca de estos.
Respecto a la segunda razón, en las últimas décadas he cobrado relevancia la localización global con el fin de reducir los costes, fundamentalmente laborales, esto supone trasladar una parte a la totalidad de las actividades productivas de las empresas a un país emergente con la finalidad fundamental de aprovechar las ventajas derivadas de los menores costes laborales de esta área geográfica, vendiendo, generalmente, los productos en los mercados de origen. Términos como “deslocalización” o “desintegración de la producción” se utilizan como frecuencia en referencia a este tipo de decisiones.
Es preciso indicar que, al tomar sus decisiones de localización, es frecuente que las empresas se muevan por una combinación de las dos razones señaladas anteriormente, introduciéndose en países en vías de desarrollo, que tienen reducidos costes laborales, con el fin de aprovechar esta ventaja tanto para abastecer al propio mercado local como para suministrar a otros países próximos.
La principal razón es que ha impulsado la localización de un gran número de fábricas en los PECOS es, precisamente, el reducido costo de la mano de obra.


    Una reflexión sobre la localización en pises en vía de desarrollo con el fin de reducir costes.
La estrategia de localización en países de vía de desarrollo persiguiendo, fundamentalmente, el objetivo de reducir costes salariales resulta, en algunas ocasiones, discutible y por ello, es preciso realizar un análisis más detallado, valorando la idoneidad de esta decisión, es importante señalar que en la actualidad lo clientes demandan, cada vez más productos mayor de valor añadido y calidad y, menor medida, productos de menor coste. Si bien en algunos casos puede resultar una decisión acertada, no parece exenta de problemas, que deben ser considerados, junto con las potenciales ventajas derivadas de esa localización, en el momento de tomar esta decisión.
El análisis de esta decisión se puede realizar tomando en consideración tres aspectos básicos. Por un lado, es necesario determinar si realmente se consiguen menos costes como consecuencia de esta localización. En segundo lugar, conviene identificar si existe alguna ventaja alternativa derivada de fabricar y comercializar los productos sobre el país de origen y que se perdería al fabricar en un país en vía de desarrollo y vender los productos en otros países. En este sentido, resulta interesante realizar consideraciones relacionadas, entre otros factores, con las características de los países de destino y las consecuencias derivadas de eliminar plantas productivas en el país de origen. En tercer lugar, se reflexiona acerca de la responsabilidad social de las empresas ante sus decisiones de localización en países emergentes.

El potencial real de reducción de costes.
Generalmente, la reducción de costes aludida por los fabricantes a la hora de localizar planetas productivos en los países emergentes se refiere básicamente al costo de la mano de obra. Sin embargo, el coste total es un concepto mucho más amplio y que incluye muchas más partidas o elementos. Asi como una encuesta entre fabricantes, realizada por la asociación nacional de consumidores de estados unidos descubrió que, por término medio, la mano de obra representa únicamente un 15 por 100 de coste de fabricación de un producto. Incluso para la mayoría de artículos electrónicos, la mano de obra representa tan solo de un 5 a un 10 por 100 de coste total. Por tanto, es poco probable que el ahorro en salarios tenga un gran impacto en el coste total de fabricación, ya que los ahorros se producen, no sobre el coste total, si no, por término medio, sobre el 15 por 100 del mismo. En este mismo sentido, la estructura de los costes de productos está determinada fundamentalmente por el coste de los materiales, la depreciación del equipo, la carga de capitán y los gastos generales de apoyo.
Por otra parte, los ahorros netos de costes son, en ocasiones, menores a los esperados. Este es debido a varias razones , por una parte, al trasladar una fábrica a un país en vía de desarrollo hay que tener presente que la productividad de su fuerza laboral es habitualmente menor ala de un país desarrollado, por lo que una comparación lineal de salarios proporciona una idea inexacta de los ahorros potenciales. Para obtener el valor real del ahorro conseguido es necesario tener en cuenta la relación entre los salarios y la productividad, dado que el pago de un salario bajo a un trabajador con un productividad pequeña puede ocasionar, en el extremo, un pago real mayor en términos relativos. Asi mismo, hay que tener en cuenta que la formación de la mano de obra en los países en vía de desarrollo es generalmente menor, que en los países desarrollados, lo que conlleva a la necesidad de invertir recursos en formación para que los trabajadores sean capaces de llevar a cabo las tareas de fabricación, mantenimiento y control de calidad de forma adecuada.
Por otro lado, existen estudios que muestran que es preferible la ubicación en países industrializados, o reciente mente industrializados, dado que las economías obtenidas en estos superan a las obtenidas por el menor coste de mano de obra en países en vía de desarrollo.

Ventajas de producir en origen y riesgos de producir en países emergentes.
Como se ha señalado con anterioridad, el coste no es la única variable relevante en la decisión de compra de un producto. Asi como la empresa que desee tener relaciones duraderas con los clientes debe mantener nivele elevados de la calidad, lo que consigue con mucha mayor dificultad si localiza la fábrica fuera del país donde se van a comercializar los productos. Si ya es difícil controlar la calidad en las fábricas localizadas cerca del mercado final, más difícil aun es hacerlo cuando existen muchos kilómetros de distancia entre los centros de producción y dicho mercado.  La comunicación es el aspecto que más se reciente.  Los trámites de los cambios de ingeniería llevan mucho tiempo.
Asi mismo, aunque algunas empresas consideren que tiene poca importancia fabricar en el extranjero en busca de salarios más bajos, ya que el mayor valor añadido que hará en el país de origen, donde se desarrollan las actividades de investigación y diseño, realmente, no siempre es conveniente separar las actividades de diseño y fabricación, ya que están íntimamente vinculadas .
Por otra parte, la búsqueda de empresas y productos globales, hace olvidar las características específicas de la empresa y del lugar en que está ubicada, que son fuentes reales de ventajas competitivas. Diseñar, incluso más que fabricar, un producto complejo, puede requerir complejas capacidades organizativas, directivas y de integración de sistemas, precisamente el tipo de cosas difíciles de transferir al extranjero. Los productos pueden ser globales, pero sus sistemas productivos pueden demandar el tiempo específico, que depende del lugar donde la fábrica está localizada debido a la existencia de proveedores con conocimientos muy especializado y tecnología avanzada que no se da en ningún otra parte del mundo y que no están dispuestos a trasladarse con una empresa.
Localizarse en lugares que están próximos a los centros de investigación extranjeros o que permitan atraer a personal cualificado y con talento resulta fundamental mente para la fabricación de productos de alta tecnología.
Las empresas que dependen del exterior son más lentas para responder a los cambios de impuestos por las exigencias del mercado. Muchos clientes no quieren depender de suministros que se fabrican a miles de kilómetros de distancia. Son clientes que, por tanto, se perderán si se decide localizar la fábrica en el extranjero. Los plazos de entrega a clientes enlazan directamente con la entrega de las materias primas y componentes a la planta productiva por parte de sus proveedores. Si los suministros se retrasan, el plazo de entrega a clientes se alarga debido a que puede generarse, incluso, interrupciones a la producción, la mayor parte de las empresas no posee ni la escala ni el potencial económico necesario para crear su propia red de proveedores. Existen, en este sentido serias dificultades para conseguir proveedores calificados en los países en vía de desarrollo y con frecuencia, en los países de origen se tiene una red de proveedores locales muy competitivo. Estas consideraciones tienden a favorecer la instalación en regiones industrializadas.
Cabe señalar, además, que la dirección de la fábrica instalada en un país emergente puede constituir también un serio problema, con frecuencia existen dificultades para trasladar los equipos directivos apropiados para gestionar el negocio en ese país.
Asi mismo, una vez que la empresa traslada sus instalaciones de producción al extranjero, el gobierno anfitrión puede comenzar a presionar a la dirección para que incorpore al producto componente de fabricación nacional.
Otros desafíos importantes de la localización en el extranjero son los idiomas, normas y costumbres diferentes, leyes y reglamentos desconocidos.
Además, esas decisiones de localización se enfrentan denominado ‘’ riesgo país’’ , derivado de que, en muchas de estas localizaciones potenciales, las condiciones políticas, sociales y financieras no son estables, y esto puede ocasionar graves daños ala empresas allí localizadas, si el país, por ejemplo sufre un giro político inesperado o una crisis financiera. Los tipos de cambio y otros aspectos de riesgo están obligando a la empresa a ser flexibles en relación con la capacidad y las ubicaciones, asi como considerar sus redes mundiales de un modo coherente.
Finalmente, ha de tenerse en cuenta que las decisiones de localización en un país extranjero para la fabricación de productos y componentes que se vende en el mercado nacional contribuyen a desindustrializar el país y a destruir puestos de trabajo. Esto puede dar lugar a las denominadas “empresas huecas”, las cuales trasladan todas las actividades productivas a otras zonas geográficas, dejando en el país de origen únicamente las actividades que generan más valor, pero que crean poco empleo. Asi mismo, trasladar la producción a países extranjeros puede posponer la inevitable decisión de reforma de determinadas áreas del negocio.

Responsabilidad social de la empresa ante sus decisiones de localización
Las empresas que deseen localizarse en un país en vía de desarrollo, por cualquiera de las razones enunciadas, han de tener presente, además de los factores señalados, cuestiones relacionadas con su responsabilidad social, tanto con relación a los países que se localicen como al que es abandonado o ver reducida su capacidad instalada.
En este sentido, cabe destacar dos aspectos. Por un lado, ante la localización de un gran número de fábrica en países en vía de desarrollo han aparecido un gran número de denuncias y se ha creado una sensibilidad en la opinión publica en relación a las condiciones de trabajo impuestas ala empresas a sus operaciones con el fin de alcanzar la máxima productividad eh incurrir en los mínimos costes generando asi, productos de precios muy bajos o con márgenes elevados.
Por otro lado, ante todo este proceso existen voces que tratan de exigir que las empresas que trasladan sus fábricas a países en vía de desarrollo hagan frete a sus responsabilidades con el país que abandonan, en relación con las ayudas recibidas, los problemas de creación de empleo y las consecuencias sobre los trabajadores despedidos y sobre las industrias auxiliares. No obstante. Hay que tener en cuenta que exigir responsabilidades de este tipo supone estableces barreras a la salida de las fábricas y supondría un arma de doble filo, ya que implícitamente se estarían creando barreras a la entrada.
Comentarios finales: la decisión final acerca de la conveniencia de la localización en un país en vía de desarrollo requiere el análisis conjunto de todos los factores previamente mencionados.
En este sentido, algunas multinacionales han sabido alcanzar las ventajas de ambas localizaciones coordinando la producción de componentes en los centros de fabricación de bajo coste con el montaje final de los emplazamientos de alto coste próximo a los clientes.
Señalar asimismo, que algunas empresas están aplicando una localización “dual”, y simultanean localizaciones en países desarrollados y en vía de desarrollo dependiendo del tipo de producto fabricado en cada planta y del destino final de los mismos.


SELECCIÓN DE UN EMPLAZAMIENTO.
Se han analizado los aspectos estratégicos claves que deben considerar una empresa de plantearse la localización de una nueva instalación productiva. No obstante, cabe señalar diferentes niveles de la decisión de la localización. Este análisis puede organizarse en tres fases:
1.    Decidir si la empresa ubicas u instalación productiva en el propio país donde desarrolla su actividad o en un país extranjero.
2.    Una vez decidido el país, decidir la región.
3.    Decidir la localidad.
Por su parte, el microanálisis se centra en la evaluación de lugares específicos dentro de la localidad seleccionada.
Para concretar ambos niveles de decisión, existe un amplio conjunto de modelos de localización. Los modelos de localización, en cualquier caso, son más útiles  cuantos más factores consideres. Si bien los modelos solo utilizan factores cuantitativos, es necesario tener presente los factores cualitativos que, en muchos casos, resultan determinantes.
Por lo que se refiere a las técnicas disponibles, y clasificándola en función de su naturaleza, es frecuente distinguir tres tipos:

Método exacto. Son capases de ofrecer una solución teóricamente óptima para los datos considerados. Su principal problema es que requieren, habitualmente, simplificar demasiado la realidad.

Método heurístico. Establece una serie de reglas o procedimiento que facilitan la búsqueda de una solución satisfactoria, reduciendo significativamente el esfuerzo de Calculo, el tiempo y el coste de la solución.
Simulación: permiten una representación del problema más aproximada a la realidad que los métodos anteriores, porque incluyen multitud de aspectos, variables y parámetros, aunque tampoco orecen una solución óptima. No obstante, puede ser preferible una solución subóptima para un planteamiento del problema en términos más exactos que una solución supuestamente óptima para una descripción más deficiente del mismo
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Imitar a los competidores. Este criterio de localización reside en localizar una nueva fábrica en la zona elegida anteriormente por empresas similares, específicamente si se trata de la empresa líder.
Los factores que provocan un aumento en la productividad y que se encuentran fuera de las empresas individuales, reciben el nombre de economías externas de escala o de economía de aglomeración. En estas localizaciones se concentran en gran medida la innovación y el éxito competitivo.
Los clusters son un nivel más evolucionado de los distritos industriales, y consisten en una concentración geográfica de empresas e instituciones interconectadas, que actúan en un determinado campo. Un cluster incluye un conjunto de empresas relacionadas y otras entidades relevantes para la competencia en el mercado, tales como proveedores de campos, maquinaria y servicios. También ofrecen un buen acceso a canales de distribución y clientes, asi como relaciones horizontales con fabricantes de productos complementarios y a otras empresas que requieren habilidades tecnologías o inputs similares.
El cluster afecta a la competencia de tres formas:
a)    Aumento de la productividad de las empresas localizadas en esta área, mediante mejor a un mejor acceso a input, a empleados potenciales , a proveedores, a información y a complementariedades con otras entidades de cluster
b)    Dirige la dirección y velocidad a la innovación.
c)    Estimula la creación de nuevos negocios en esta área: de ahí su influencia en la localización de las empresas.